La Visión Luhmanniana de
los sistemas Socio-Culturales
Edgard González Suárez
Universidad Veracruzana
Fac. de Pedagogía
El desarrollo de la
visión luhmanniana de los sistemas ha recobrado vigor en los últimos 15 años
por su intento de lograr establecer los límites de una teoría de lo social.
Específicamente de los sistemas socio-culturales como los denomina el propio
Niklas Luhmann. La visión indica y construye un aparato conceptual abstracto y de
comprensión pausada y difícil que va desde el (sub) sistema jurídico,
educativo, laboral, deportivo, político o moral hasta el (sub) sistema
financiero, tecnológico-industrial, las telecomunicaciones y la ecología.
Forjar un entramado teórico como la visión de Luhmann ha requerido de un
trabajo inter y transdisciplinar, y una fuerte formación filosófica y de
acercamiento a la física, a la biología y a la neurobiología también. Es hasta
1984 cuando publica el SISTEMA SOCIAL que
Luhmann trasciende el campo académico y llega hasta el teórico-formal.
El planteamiento
central de Luhmann es que los sistemas socio-culturales se construyen por la COMUNICACIÓN, y se caracterizan por ser abiertos, dinámicos y complejos. Lo que
constituye un sistema socio-cultural es la dinámica autoregenerativa de la
comunicación. De esta manera, para Luhmann lo real es la
comunicación-observación, la diferencia entre sistema y entorno, y sobre todo
la inexistencia de una sustancia única, identitaria, preconstruida –clase,
poder, proletario, sujeto, historia, etc.- Para la visión Luhmanniana el
sistema –actos reconfigurados de comunicación- lo que abre siempre hacia
adelante son preguntas, y posibilidades, lo único cierto es que no hay certezas
futuras. Lo que se reconfigura cotidianamente es la pluralidad de sentidos que
convergen y divergen en un campo de posibilidades realistas. Lo cual
inevitablemente nos lleva a una pluralidad de observadores, colocados
indistintamente, que observan e interpretan el movimiento de lo real, y solo
ofrecen miradas y posibilidades transitorias como respuesta.
A Luhmann se le ha
criticado en Europa y los EEUU por su visión hiperrealista de la sociedad, por
su alto grado de abstracción y su descripción, y su falta de crítica a ese
realismo destructor. A la teoría de sistemas y a Luhmann mismo se le ha tachado
de conservador, de ser un enfoque al
servicio de las élites dominantes, pero me parecen más bien críticas
ideológicas, más que teóricas o científicas.
Los principales
ataque se constituyeron en los años setentas y ochentas, cuando el
enfrentamiento ideológico se encontraba renovado y en pleno auge del éxito
neoconservador. Lo cual, desde mi perspectiva diluyó y nubló gran parte de los
aportes de la visión de Luhmann. Su enfrentamiento intelectual con Habermas
acabó por colocarlo en el sillón para los castigados, pero que 25 años después
podemos ver que en el fondo tenía razón.
Los sistemas
socio-culturales siguen una trayectoria sinuosa, impredecible, incierta y que
se acerca, más que se aleja a una irremediable confrontación, o en términos
sistémicos a su reconfiguración, a su transición a un estado no predetermidado,
ni calculado a priori. Los sistemas socio-culturales enfrentan una condición
realista: la complejidad de sus inter-conecciones y la incertidumbre de sus
respuestas.
En la visión de
Luhmann la comunicación produce y reproduce la sociedad. La comunicación se constituye
en la operación básica, en la célula expansiva que desencadena la formación del
orden y la organización social. En Luhmann, la creación institucional es la
expresión concreta de los actos comunicativos de un sistema socio-cultural
determinado.
Pero a pesar de los
ataques ideológicos sobre la teoría de sistemas luhmanniana, es el mismo Niklas
quien deja a la ética la discusión misma sobre el carácter, funcionalidad, y
ajustes a la institucionalidad creada y construida por las relaciones y la
comunicación humana. Establece al campo de la política como la esfera o
subsistema idóneo para determinar las reconfiguraciones necesarias y deja al
realismo existente la posibilidad de sus múltiples respuestas.
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