MACROSCOPIO
Edgard
González Suárez
08 DE
NOVIEMBRE DE 2021
UN
REGRESO A CLASES INCONCLUSO AUN
Según la Secretaría de Educación Pública
han regresado a clases presenciales 18.5 millones de alumnos, es decir, cerca
de del 72% de la población estudiantil total. Es decir, tomando en cuenta a los
alumnos de las Universidades y posgrados. Y más del 92% de los alumnos de los
subsistemas de educación básica. En la visión del poder ejecutivo, “no hay
riesgos de contagios en los niños”, y “el regreso a clases tampoco ha
significado un aumento de contagios en la población adulta”.
Con estos datos, la SEP supone que antes de terminar el año el 100 % de los alumnos del sistema de educación básica, incluye preparatoria por supuesto, estén tomando clases presenciales. Y aunque en el discurso mediático se sigue hablando del regreso a clases obligatorio, la verdad es que ni la SEP, ni el presidente han vuelto a insistir con el término “obligatorio”.
Ahora que la Ciudad de México, y
algunas otras ciudades del país, prácticamente han reiniciado clases, con
singularidades, pero ya se han vuelto a ver miles de estudiantes en las
estaciones del metro, en el transporte público, a padres e hijo en la modalidad
de taxis, y se ha sentido el aumento del tránsito vehicular. Las que permanecen
aún paradas son las Universidades Públicas.
Y aunque el Gobierno Federal y
los Gobiernos estatales han estado presionando a las rectorías de cada entidad
federativa, la verdad es que las Universidades públicas obedecen a otra lógica,
y contempla otros elementos. Entre ellos, todas las Universidades Públicas del
país tienen autonomía administrativa, y deciden bajo sus órganos internos, las
modalidades y características de su regreso a las clases presenciales.
Contienen, en su mayoría, a una población juvenil y adulta, mayores de 18 años,
trabajan bajo formatos y modelos educativos diversos, la mayoría divididos en
cuatrimestres o semestres, se diferencian respecto de la educación básica, por
los logros y avances en los programas de estudios, en su mayoría, nunca dejaron
de trabajar, y pudieron impulsar los trabajos en línea con mucho mayor
eficiencia que otros subsistemas.
El poder ejecutivo ha mostrado su
interés por el regreso pleno y total a las clases presenciales, e incluso ha
mostrado su desacuerdo y molestia por que la Universidades no regresan a
clases.
A mi me parece que en el fondo
hay 4 cuestionen que merecen atención:
1. Los poderes federales y estatales están lidiando con las autonomías y los procedimientos internos. En este sentido, cada universidad está intentando corresponder la decisión del regreso a clases con el animo y apoyo de su comunidad académica.
2. Algunos
grupos dentro de las universidades están jugando a la política, tratando de
hacer valer su autonomía, y en otros casos, jugando a las fuercitas con el
gobierno por razones ideológicas. Es el caso de Nuevo Leon, Jalisco, Querétaro,
Guanajuato, entre otras.
3. Los
modelos administrativos de las universidades son diversos y diferentes, en su
mayoría están terminando el semestre o el periodo en curso, y muchas de ellas
están dejando que el periodo se extinga, y en el periodo de receso tomar las
decisiones correspondientes para el regreso en febrero próximo.
4. En
algunos casos, como el de la Universidad Veracruzana, la comunidad académica
reclama una nueva vacunación o un refuerzo, ya que en su mayoría de los
docentes fueron vacunados con la vacuna CANSINO, alrededor de la cual hay una
gran polémica mediática. Que nadie ha freneado o aclarado.
El regreso a clases en las Universidades Públicas del país oscila entre el 25% y el 50% de manera irregular, es decir, que los porcentajes no son consistentes. Al respecto los rectores de algunas universidades han señalado:
Universidad Veracruzana: “Vamos
a tener algunas clases presenciales… (laboratorios y talleres) pero vamos a
seguir con clases virtuales, pero ya iniciamos el regreso presencial de manera
gradual”
Universidad de Guadalajara: “esta
fue una de las estrategias más importantes de la Universidad de Guadalajara
para implementar un regreso seguro a las aulas…se muestrearon un total de 192
profesores, de los cuales 17% dieron positivo a COVID”
Universidad de Guanajuato: “el
número de estudiantes que asisten a actividades académicas presenciales podrá
incrementarse hasta el 50% del aforo máximo de los espacios académicos…la
incorporación a las actividades académicas presenciales es, sin excepción
alguna, voluntaria.
Con todo, el regreso a clases presenciales tiene de suyo su propia complejidad, implica no solo una decisión administrativa, sino el análisis de variables tan potentes como las condiciones infraestructurales y de mantenimiento de las escuelas, la revisión de las condiciones sanitarias en los centros educativos, las condiciones de salud del personal académico, administrativo y estudiantil, los refuerzos de la vacunación, en caso necesario, y el reajuste a las condiciones didáctico-pedagógicas de los avances programáticos, número de clases, tareas, evaluaciones, etc.
Sin duda, el regreso a clases
presenciales significará también un reinicio de los esfuerzos voluntarios,
actitudes, y compromisos tanto de autoridades como del personal académico con
la enseñanza y el aprendizaje de los alumnos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario